domingo, 3 de febrero de 2013

Vinoterapia: el poder curativo del vino

 

Hoy en día el papel del vino ha vuelto a ser una herramienta muy importante para nuestra salud. Todas las terapias que antiguamente se utilizaban para curaciones o festejos, podríamos decir que hoy han resurgido, respaldadas por estudios científicos que nos ayudan a entender todas los beneficios que aportan los taninos a nuestro cuerpo. Una de las terapias que más me gustaría que conozcan por todos los beneficios que brinda es la Vinoterapia.

¿Qué es?

A pesar de que muchas personas aún lo ven como algo exótico, en realidad no lo es; de hecho, es la terapia más divertida y fácil de llevar a realizar en nuestra vida cotidiana. Su nacimiento nos lleva a los siglos XIV y XV, donde el Rey Luis XV solía llevar a cabo curaciones con mascarillas a base de vino, las cuales aplicaba a sus mujeres más hermosas. Nada perdido, el Rey Sol.

No obstante, dentro de los principales inventores de la Vinoterapia están Matilde Cathiard y Bertrand Thomas, unos estudiosos y apasionados del vino, quienes inauguraron el primer Centro de Vinoterapia muy cerca de Bordeaux. Esta técnica fue cobrando auge y expandiéndose de forma impresionante. Actualmente existen muchos centros donde es posible disfrutar de esta terapia, sobre todo en países productores de vino como España, Italia, Argentina y Brasil.

Pero para no irse tan lejos, en México ya se cuenta con algunos centros de spa que ofrecen esta terapia; de hecho actualmente existe una empresa mexicana, ubicada en el Valle de Guadalupe, Ensenada (zona de mayor producción de vinos en México), que está produciendo los accesorios necesarios para realizar la Vinoterapia en casa.

Beneficios

Ahora les voy a contar la parte que más les tendría que interesar, y es que los principales derivados de esta técnica son los siguientes tratamientos: relajantes, rejuvenecedores, reductores, reafirmantes o tonificantes, circulatorios etc.

La esencia de los taninos del vino aporta una cierta cantidad de antioxidantes que nutren nuestro cuerpo en muchos aspectos; los principales son:

Regeneran las células de la piel y ayudan a desintoxicarla.
Contribuyen a una mejor circulación sanguínea, protegiendo el sistema circulatorio y favoreciendo la microcirculación como también el sistema cardiovascular.
Una de los mayores aportes está vinculado a que neutraliza los radicales libres, que son los que se encargan del envejecimiento cutáneo, por lo que colabora en la disminución de las arrugas y protege la piel de las agresiones del medio ambiente.
Por su importante función de prevenir la rotura de las fibras de elastina y colágeno, mantienen la piel elástica favoreciendo la tonificación de músculos, senos, reducen abdomen y afirman glúteos, así que ya no sufra tantas horas en el gimnasio y les sugiero que empiecen a meter dentro de sus agendas semanales una divertida, placentera y saludable sesión de Vinoterapia.

Vinoterapia a la carta

Bueno, y ahora la pregunta del millón '¿Cómo la utilizo?'. Bien, una de las formas más específicas sería poder conseguir estos productos a base de vino (consultar a mi mail para más información), pero para no dejarlas esperar mucho, le voy a pasar una receta casera para que vayan intentándolo. Lo importante de esta terapia es que el agua este en un punto medio de temperatura.

Receta

1. Comprar unas tres botellas de un vino (muy barato), así como 500 ml de miel para adicionar al agua tibia.

2. Muy importante tener una copa de un muy buen vino para acompañar, y si hay música clásica, mejor.

3. El lugar a realizar sería más conveniente en una tina.

4. Relajarse y disfrutar.

Agradecemos al sommelier de vinos Ariel Morales por las facilidades dadas para la realización de este artículo. Más información @arielwineman y ariel.morales.sommelier@hotmail.com




Recetas cocina

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